Seguro que me gustas mucho, que me vuelves loca, y me pones nerviosa a mil. Las cosas nunca funcionan últimamente como quiero, y mucho menos contigo, tuve que aprender a dejar de extrañarte, aprender a olvidarte y fue tan complicado que me merezco un premio.
Sonrió de vez en cuando, de una forma sincera, no es por ti, es por mí, por mis tonterías, pero sonrío menos. Muchas veces me dan ganas de ir y robarte un beso, pero recuerdo no te lo mereces, que te los de la persona que tu elegiste, no mereces ni un abrazo, porque yo no puedo darte un abrazo de amigos, no puedo verte sin perderme y verte como idiotizado.
Las cosas no han cambiado tanto, quizá solo una y las más radical, no te quiero tanto, como te quise una vez.

No hay comentarios:
Publicar un comentario